Sé que no es fácil pedirte lo que te voy a pedir sobre todo porque conozco esa sensación de caída sin fin cuando sientes que alguien que amas se va de tu lado, pero siento que debo decirte esto antes de que me dejes ir cuando aún sigo aquí.

En este mundo hay dos clases de personas: las que creen en que las relaciones serán para siempre y que vivirán constantemente cerca y luego están las otras personas que son capaces de aceptar que todo tiene un principio y un fin y aunque sé que tú eres de las primeras espero que me entiendas, aunque yo sea de las segundas.

No puedo evitar notar la tristeza que te acompaña por estos días por eso decidí decirte algunas cosas por aquí con la esperanza de que veas la situación desde un nuevo punto de vista. La primera es que pese a que esté lejos de ti eso no significara que esta conexión tan única entre nosotros dos desaparezca o cambie. La segunda es que te pido que no me dejes ir cuando aún sigo aquí por miedo a que duela mi partida, porque eso me lleva al punto número tres: tratar de usar un paracaídas no funcionará.

Mi intención desde luego no es que te pongas más triste solo quiero que entiendes que no podemos o, mejor dicho, no debemos apresurarnos a actuar por las cosas que aún no han pasado. Mi partida es inevitable, eso es lo que significa crecer, pero eso no significa que por alejarte de mí un poco antes te dolerá menos porque desde la experiencia te digo que de que dolerá, dolerá.

Solo te pido que pienses en que si fuera hoy el último día en el que me vieras dime: ¿de verdad te alejarías de mí o disfrutarías estas últimas horas a mi lado sabiendo que no me verás más?

Aceptar el cambio duele y duele mucho, creo que son de esas cosas que te van empezando a doler más con los años, cuando crees que tu vida va a ser de cierta manera, pero termina siento de otra. Pero al igual que la felicidad la tristeza es parte de la vida y cohibirse de ese sentimiento es lo mismo que cohibirse de vivir, ¿no te parece?. Sé que suena a uno de esos consejos baratos que te pueden dar tus amigos, pero no te cierres a vivir, no me dejes ir cuando estoy aquí y sobre todas las cosas no dejes ir la oportunidad de sentir, experimentar y ver nacer un nuevo comienzo.